¿Cuándo y cómo te conviene tomar el sol?

Conoce los beneficios de tomar el sol y cuál es la mejor forma de hacerlo para apoyar tu salud.

¿Cuándo y cómo te conviene tomar el sol?

El verano está cada vez más cerca en el hemisferio norte y es momento de buscar un antisolar (bloqueador solar) hecho con ingredientes sanos. Aquí te compartimos algunas recomendaciones.

¿La luz del sol es peligrosa?

Hemos escuchado que recibir el sol puede causar cáncer y que envejece la piel.

Sin embargo, la luz del sol es una gran fuente de energía y de salud para nuestro organismo si la sabemos aprovechar (con algunas precauciones esenciales). Uno de los beneficios más conocidos es la vitamina D, que nuestro cuerpo produce cuando recibe la luz del sol. La vitamina D es una protección natural ante muchos tipos de cáncer y enfermedades del corazón; es clave para la salud del cerebro y del sistema inmune, para el desarrollo de los niños y para tener huesos fuertes.

Además de la vitamina D, cuando recibimos el sol se producen múltiples procesos biológicos benéficos en todo nuestro cuerpo. Por eso sabemos que la luz solar es un antidepresivo poderoso y ayuda a armonizar nuestros ritmos hormonales.

¿Todos los rayos ultravioleta son iguales?

No. Para elegir el mejor antisolar, hay que entender una diferencia básica entre los rayos UVA y UVB.

RAYOS UVB
No penetran más allá de las capas superficiales de la pielNo penetran ventanasSon los necesarios para producir vitamina DAfectan las capas externas de la piel: cuando nos exponemos de más, producen inflamación y quemadurasEl FPS indicado en los antisolares se refiere a qué tanto pueden protegerte de los rayos UVBRAYOS UVA
Penetran más profundamente en la pielPenetran ventanasNo necesarios para producir vitamina DSon los que más contribuyen al envejecimiento de la piel y arrugasLos antisolares no están obligados a indicar qué tanto pueden protegerte de los rayos UVA

¿Cuándo hay que utilizar antisolar o bloqueador y cuándo no?

Para que nuestro cuerpo pueda producir vitamina D, es importante recibir la luz del sol durante unos 10 a 20 minutos al día (o varias veces por semana) sin utilizar antisolar o bloqueador, pues estos reducen la capacidad del cuerpo para producir la vitamina.

Después de estos minutos (o en cuanto tu piel empiece a enrojecerse), es esencial protegerla, ya sea de manera física, untándote antisolar o ambos:

  • Con barreras físicas: sombrero, gafas de sol, sombrillas, prendas de manga larga, etc.
  • Con antisolar en las partes del cuerpo que sigan expuestas al sol

¿Cuál es la diferencia entre el antisolar químico y el mineral?

QUÍMICOMINERALAbsorben los rayos UV y desencadenan una reacción química que transforma los rayos en calor. Bloquea los rayos UV creando una barrera física sobre la piel para que los rayos reboten.Sus ingredientes clave llegan al torrente sanguíneo y han sido relacionados con riesgos para la salud, como desórdenes hormonales, alergias y aumento del riesgo de cáncer. Dos ingredientes clave a evitar son la oxibenzona y el octinoxato. Un ingrediente relativamente más seguro es la avobenzona.Los ingredientes clave no llegan al torrente sanguíneo y se consideran seguros para nuestro cuerpo. El óxido de zinc bloquea tanto los rayos UVB como los UVA, mientras que el dióxido de titanio bloquea sólo rayos UVB.Ingredientes sintéticos.Aunque se pueden obtener de minerales, la mayor parte del óxido de zinc y dióxido de titanio se producen en laboratorios. Se consideran “sintéticos seguros”. Algunos afectan el entorno natural, en especial el ecosistema marino y los arrecifes de coral. Son seguros para el entorno natural, siempre y cuando no tengan nanopartículas (non-nano). Son más fáciles de untar. Son más espesos y suelen dejar una capa blanca en la piel, aunque ya hay opciones que incluyen emolientes o pigmentos para evitarlo.Pueden causar efectos alergénicos en la piel.El óxido de zinc ayuda a calmar la piel, tiene efecto antiinflamatorio y puede apoyar en el tratamiento contra el acné. En ambos casos: es recomendable evitar el antisolar en aerosol, pues al inhalar las partículas puede haber riesgos para los pulmones.